La denominación comercial se conoce como aceite refinado de girasol y es uno de lo más utilizados en los países europeos dentro del sector de la hostelería y restauración, representando como una vía económica y saludable dentro de la variedad de aceites del mercado.

Se obtiene a partir de las semillas de girasol sometidas al descascarillado, trituración, extracción y refinado, consiguiendo disminuir el grado de acidez máxima a 0,2 grados, se consigue un color amarillo suave, un sabor ligeramente dulce que permite mantener el sabor de los alimentos que se cocinan con él.

El aceite de girasol compuesto totalmente producto refinado y extraído de la semilla del girasol, es uno de los aceites más populares entre los aceites derivados de semillas, esto se debe a que contiene ácido linoleico, Vitamina E, ácidos grasos no saturados, fundamentales para el ser humano, además, su alto grado de ácidos grasos poliinsaturados y mono insaturados importantísimos para la salud.

El aceite de girasol refinado tiene un estupendo comportamiento con las altas temperaturas, convirtiéndose en uno de los aceites más utilizados en hostelería y restauración, sus usos en mayonesas, planchas, asados, bizcochos, bollería, y gracias a su sabor lo hace especialmente empleado en frituras.